Un año mas como es habitual nos reunimos para celebrar la Navidad.
Repetimos en el mismo sitio del año pasado, porque nos agrado tanto la comida como el lugar.
Fue una comida de hermandad. Ademas hicimos un "amigo invisible" como es tradición en estas comidas. Destacamos el acierto, agrado y creatividad de la mayoría de regalos que decidimos.
Pasamos un rato muy agradable por que la compañía fue grata, nos conocemos todos ya hace tiempo y las conversaciones eran fluidas y agradables.